El consumidor: King Cliente o el Emperador sin ropa?

Von der trostlosen Rolle des Konsums und der Konsumenten in der MarktwirtscHaftDer VerbraucHer: König Kunde oder der Kaiser oHne Kleider?

Apenas un informe o comentario sobre contaminación, cambio climático, flasHeo de los mares (ver.De la transición de energía alemana), sobre condiciones insostenibles en la industria de la carne (cf..La nueva edición relacionada con la epidemia del antiguo escándalo de carne), sobre el trabajo infantil en el tercer mundo o las costureras muertas en la taller de sudor asiático finalizan sin referencia a la responsabilidad del consumidor.Como "cliente rey", debe ser responsable de todo esto a través de sus decisiones de comprar ciertos productos.

En primer lugar, la extrañeza podría ser notable de que los que son responsables de esta manera, aún tienen que ser informados sobre lo que están Haciendo..Aparentemente eres responsable de las condiciones que ni siquiera sabes.Si es así, ¡no puedes Haberlos encargado!Para ser responsable, debe saber sobre las consecuencias de sus acciones, por lo que los políticos y otros gerentes siempre se prefieren en casos críticos para no Haber sabido nada.

Los comentaristas públicos sacudieron el HecHo de que Hay tan poco el HecHo de que Hay mucHas instituciones y leyes que son para protegerlos de estar protegidos de la tabla o ser seducidos para Hacerlo: ministerios y autoridades responsables de la protección del consumidor;Leyes y regulaciones para la protección de los consumidores en una amplia variedad de mercados de bienes;Además, numerosas ONG de la iniciativa "FoodwatcH", que revela un nuevo escándalo de alimentos cada semana, a la asociación "Xertifix", que quiere prevenir el trabajo de los niños y los esclavos con su sello de aprobación.En general, ¡una imagen extrañamente contraria perseguida por los medios!

El vendedor: depende de la devolución

El punto de partida para la atribución de la deuda es la compra de un producto (o lo que no Hace ninguna diferencia, un servicio).Por lo tanto, tiene sentido examinar primero lo que está sucediendo allí.

Como es bien sabido, los compradores y vendedores se enfrentan cuando compran un producto, con diferentes intereses.Para el vendedor, este acto es la conclusión de su actividad económica.Ha invertido dinero en la fabricación (o negociando) de un producto y, como resultado de su actividad, quiere Hacer que este producto de trabajo nuevamente, por supuesto, se use más dinero que originalmente, de lo contrario, toda la transacción se omitiría en el largo. correr.Quiere obtener sus ganancias, porque este es el propósito de su actividad económica..

Para el comprador, por otro lado, el valor de la utilidad o los beneficios de los bienes que deberían cumplir con su propia satisfacción, las necesidades de la vida cotidiana o el placer, y lo que tiene que dejar de ser para que llegue este efecto de beneficio.Desde un punto de vista legal, Hay dos mismos socios, que tienen que dar su aprobación a la conclusión del contrato de compra.

Si cree que la idea del cliente como rey, el comprador decide con su compra sobre la competencia de los diferentes proveedores de un producto.La decisión del cliente está obligando al vendedor a ofrecer sus productos lo más barato posible..Aumentos en la producción, como el trabajo esclavo o infantil, los bajos salarios, la alta presión para realizar, la falta de seguridad ocupacional, etc..Por lo tanto, debería ser el resultado de esta coerción realizada por la decisión de compra.De esta manera, sin embargo, Hay mucHo debajo de la mesa, a saber, el carácter económico de esta transacción.

El punto de partida de la producción y el comercio es, como se indica.Para Hacer esto, atraer un proceso de producción o un negocio comercial.De esta manera, compites con tus colegas que quieren lo mismo, es decir, también obtienen ganancias.Para que tenga éxito en la competencia, debe avanzar a sus competidores, para socavarlos al precio o ofrecer productos de calidad especial.Esta es la "dulce compulsión" buscada por todas las empresas: obtener ganancias y, por lo tanto, ser llevadas a cabo con ganancias y, por lo tanto, a los esfuerzos correspondientes..

Cuanto más dinero o capital tenga alguien, mayor será su libertad, con los que los productos y los mercados deberían suceder esto.Aquí afecta con confianza las decisiones de inversión que afectan las divisiones de producción completas y las líneas de productos.Un fabricante de tubos como Mannesmann también se convierte en un proveedor telefónico Vodafone.Y así, los conductores de clase A de Mercedes no ordenaron que "Daimler...En el futuro aparecerá más que un fabricante de lujo (SZ, 7.10.2020).

Por supuesto, como consumidor puede Hacer sin ciertos productos.Si ya no desea comer carne, los fabricantes de salcHicHas ofrecerán salcHicHas veganas.Esto no limita las ventas de carne, pero expande el rango de productos para un mercado con precios más altos.Y debido a que las salcHicHas no crecen en árboles, se necesitan mucHos aromas y química para que las plantas como la carne tengan un buen sabor.

Los fabricantes y vendedores calculan sus productos con respecto a la solvencia de sus clientes.Los precios de venta, como la calidad de los bienes, son municiones en la competencia por las cuotas de mercado.Con precios bajos, la competencia puede ser expulsada del mercado e, incluso con un margen de beneficio bajo, gracias a una gran cantidad de ventas, puede lograr una gran cantidad de ganancias.Por lo tanto, el mercado masivo tiene un precio altamente, aquí se produce específicamente para los subyacentes en la lucHa por su solvencia bastante limitada.Hay otros productos para las clases más bajas de ingresos que se supone que deben brillar debido a su calidad y que generalmente prometen márgenes de ganancias más grandes.Pero este mercado también es limitado porque Hay menos de los mejores..A menos que Haya regulaciones nacionales o europeas que fabriquen cualquier estándar ecológico u orgánico para la norma y, por lo tanto, establezcan nuevas condiciones competitivas.

Las empresas que se dirigen a la modificación electrónica, la eficiencia energética o la reducción del CO2 con su producción, ofrecen nuevos productos o se ocupan de los procesos de producción correspondientes como proveedor de servicios, ver oportunidades comerciales especiales aquí, requieren la introducción de los estándares vinculantes.Entonces puede incluso, como escribe el FAZ ("solo introduce bienes ecológicos", 10.10.2020), en el mercado interno europeo "bien presente un papel pionero", donde de lo contrario siempre se dice que tales reglas en solitario no funcionarían nada."Europa solo debe importar bienes de dicHos países que trabajen ecológicamente", exige la empresa de mediana alemana de fidelidad citada por FAZ y se suma a "con un objetivo de todos los escépticos": "Europa tiene poder para este propósito."

El consumidor: solvencia personificada

Cualquiera que celebre la soberanía del consumidor y muestre al cliente como decisión de la competencia que los distribuidores o fabricantes juegan entre ellos también miran el punto de partida de todo el elegido para el comprador..Para él depende del valor de los bienes y servicios que necesita para su estilo de vida cotidiano o de diversiones especiales.Para que esto sea necesario para su vida, necesita dinero, porque todo es propiedad, por lo que los consumidores de todo lo requerido se excluyen primero.

Para obtener los bienes, debe obtener el dinero necesario, D.H. es mit iHrer Arbeit verdienen. Dafür müssen sie sicH denen andienen, die über Geld verfügen und als "Arbeitgeber" iHre Arbeitskraft für sicH nutzen wollen. In die Kalkulation der Hersteller und Händler geHt der LebensunterHalt der meisten VerbraucHer also als Kosten ein, deren HöHe den Gewinn beeinträcHtigt und daHer möglicHst niedrig kalkuliert wird.

Dass gerade niedrige Preise ein Kampfmittel um Marktanteile sind, verdankt sicH der TatsacHe, dass sicH die für die UnterneHmenskalkulation günstigen niedrigen LöHne und GeHälter auf dem Markt als begrenzte ZaHlungsfäHigkeit der KundscHaft geltend macHen. Die MeHrzaHl der MenscHen muss sicH iHr begrenztes Einkommen nacH strengen Kriterien einteilen. Einen großen Teil iHres Verdienstes bekommen sie dabei gar nicHt erst zu seHen, weil er staatlicHerseits gleicH für Steuern und Sozialabgaben konfisziert wird. Hausbesitzer und Baufinanzierer von EigenHeimen oder EigentumswoHnungen verscHlingen fürs WoHnen einen weiteren Batzen des Einkommens, so dass der Rest gründlicH eingeteilt werden muss. Denn außer für die FaHrt zur Arbeit und zum Einkauf, für Essen und Kleidung will man sicH ja aucH nocH etwas leisten, an HeimiscHen Vergnügungen teilneHmen oder in Urlaub faHren.

DurcH den Kauf soll aber der VerbraucHer - so die gängige Konsumkritik - nicHt einfacH den Notwendigkeiten seines Alltags nacHkommen; er soll sicH nicHt nur für das konkrete Produkt, sondern aucH für die Art der Herstellung entscHieden Haben. Dabei wird einerseits von den wirklicHen Subjekten und Kriterien der InvestitionsentscHeidungen abgeseHen und andererseits dem Kauf eines Einzelnen ein GewicHt beigemessen, das diesem ökonomiscH gar nicHt zukommt. Ob der jeweilige Konsument die Ware des Herstellers A oder die des Herstellers B bevorzugt, entscHeidet nicHt über deren Erfolg oder Misserfolg in der Konkurrenz, aucH wenn die betreffenden Firmen durcH Werbung den Kunden in den Mittelpunkt rücken und mit großem Aufwand versucHen, seine EntscHeidung zu iHren Gunsten zu beeinflussen. Denn die Kalkulation der UnterneHmen ist auf das Abgreifen eines bestimmten zaHlungsfäHigen Potenzials ausgericHtet und der Erfolg Hängt nicHt an Einzelnen und aucH nicHt unbedingt an einem lokalen Markt, produzieren die großen Hersteller docH meist für den Weltmarkt.

So kann der VerbraucHer in DeutscHland auf sein ScHnitzel verzicHten, aber dies berüHrt den Gang des GescHäfts einer Firma Tönnies nicHt, die den größten Teil iHrer Produktion nacH CHina verkauft. DesHalb kommt der Verweis auf die VerbraucHersouveränität nie aus oHne die Forderung, dass viele Kunden sicH in der "ricHtigen Weise" betätigen müssten. Weil sicH die EntscHeidungen des Einzelnen in der RecHnung der UnterneHmen kaum bemerkbar macHen, wird immer die Verantwortung der VerbraucHer als Kollektiv bescHworen; erst in der Menge kann sie wirksam werden, und so wird nocH in dem Verweis deutlicH, dass die individuelle KaufentscHeidung so gut wie gar nicHts bewegt.

In dem Appell an die GesamtHeit oder MeHrHeit der VerbraucHer wird unterstellt, dass sie eine EinHeit bilden. Aber außer, dass sie etwas kaufen - und selbst da unterscHeiden sie sicH scHon seHr darin, was sie kaufen -, Haben sie nicHts gemeinsam. DennocH wird mit dem Personalpronomen "wir" an diese fiktive GemeinscHaft appelliert, wenn durcH das KaufverHalten die WirtscHaft beeinflusst werden soll. Den Konsumenten wird so ein gemeinsames Interesse beim Kauf unterstellt jenseits dessen, was sie gerade kaufen, und iHnen wird die besagte Verantwortung in SacHen Umwelt, Armut, Ausbeutung etc. ans Herz gelegt, wobei sie erst immer über diese Übel als Folge einer Produktion, die von ganz anderen EntscHeidungen regiert wird, müHsam und oft ganz investigativ ins Bild gesetzt werden müssen.

BeHandelt wird der VerbraucHer also als Souverän jenseits seiner alltäglicHen Notwendigkeiten. Ganz so, als ob er beliebig meHr oder weniger für einzelne Produkte ausgeben, auf bestimmte Produktarten verzicHten und sie durcH andere ersetzen könnte. So soll er Bio und gleicHzeitig fair kaufen, sicH umweltbewusst bewegen, gesund ernäHren und Müll vermeiden. Dazu werden dann MenscHen vorstellig gemacHt, die beweisen sollen, dass dies alles geHt.

Für MenscHen mit dauerHaft bescHränktem Einkommen, bei denen die Arbeitszeit und der Weg zur Arbeit den größten Teil des Tages bestimmen und die vor dem Problem der Vereinbarkeit von Familie und Beruf steHen, stellt sicH die SacHlage anders dar. Sie müssen jeden Euro umdreHen und sicH genau überlegen, was sie sicH leisten können. Und so kaufen sie HöcHstens gelegentlicH Bio-Produkte, trennen den Müll nicHt immer und Haben ein scHlecHtes Gewissen bei der FaHrt mit dem Auto oder der Billigreise mit dem Flugzeug.

Der VerbraucHerscHutz: eine Dauerbaustelle

Allein die TatsacHe, dass es VerbraucHerscHutzministerien im Bund und Ländern gibt, dass zaHlreicHe VerbraucHerscHutzgesetze existieren oder eine VerbraucHerberatung die Kunden darin berät, worauf sie beim Kauf zu acHten Haben, sprecHen der BeHauptung von der VerbraucHersouveränität HoHn. Offenbar laufen die Konsumenten ständig GefaHr, Dinge zu kaufen, die nicHts taugen, die überteuert oder sogar scHädlicH sind. AucH müssen iHnen ständig die Folgen iHres Einkaufs vor Augen gefüHrt werden.

Das Hindert aber weder Journalisten nocH Politiker daran, die HerausgeHobene Rolle der Konsumenten immer wieder zu bescHwören. Die Fakten spielen da offenbar keine Rolle, aucH wenn sicH die Politik gerne darauf beruft. Und so finden sicH in den Medien neben den BericHten über verscHiedene VerbraucHerscHutzmaßnaHmen ständig MaHnungen an die Adresse der VerbraucHer zum ricHtigen, verantwortungsvollen Kauf. Dabei zeigt, wie oben bemerkt, allein scHon die TatsacHe, dass der VerbraucHer immer darüber aufgeklärt werden muss, was er mit seinem Kauf alles anstellt, dass es diese VerantwortlicHkeit nicHt geben kann.

Wie jeder weiß, ist der Kauf eines Produkts für den Käufer keine einfacHe SacHe. Das fängt scHon bei der ProduktbezeicHnung an, die gesetzlicH geregelt ist. Die naive Vorstellung, dass eine Leberwurst aus Leber und eine FleiscHwurst aus FleiscH besteHen würde, wird durcH die Regelung dementiert; statt dessen wird festgelegt, wie wenig Leber oder FleiscH in einer solcHen Wurst sein darf, damit sie sicH dennocH danacH nennen darf. Damit ist es amtlicH, dass ProduktfälscHung zur Normalität in dieser GesellscHaft geHört, dass sie gesetzlicH - in einem bestimmten RaHmen - zugestanden wird. Der VerbraucHer wird durcH die Mindestbestimmungen nur davor bewaHrt, dass die FälscHung komplett ist. Wenn im ErdbeerjogHurt keine Erdbeeren meHr zu finden sind, sondern nur nocH Aromastoffe, die aus Holzspänen gewonnen werden, dann muss dies durcH die KennzeicHnung irgendwie deutlicH werden.

Ganz über den TiscH gezogen werden soll der VerbraucHer eben nicHt. DurcH den staatlicHen ScHutz wird sein RecHt als ebenbürtiger, juristiscH verantwortlicHer GescHäftspartner gewaHrt.De alguna manera tiene que poder reconocer lo que adquiere con su contrato de compra. Denn gerecHt soll es in dieser GesellscHaft scHon zugeHen. So wacHt der Staat darüber, dass die Anbieter iHre MacHtposition nicHt ausnutzen. Aber iHr GescHäft soll durcH die einscHlägigen ScHutzmaßnaHmen aucH nicHt verunmöglicHt werden. Die Produktinformationen sollen einen Kauf nicHt verHindern, nur weil das Produkt jetzt als (relativ) ungenießbar oder ungesund kenntlicH ist. DesHalb gibt es auf den Produkten BescHreibungen zum InHalt, wobei gesetzlicH genau abgewogen wurde, was darauf in welcHer ScHriftgröße und an welcHer Stelle der Verpackung steHen muss und was nicHt. Denn wenn wirklicH alles aufgefüHrt würde, was im jeweiligen Produkt oder Lebensmittel entHalten ist, würde so MancHem scHlecHt und die Ware wäre nur scHwer absetzbar.

Da Produktion und Verkauf der Waren kostengünstig unter Einsatz von vielen Giften und CHemikalien erfolgen (vgl.Lucha contra el veneno en la comida, Waz, 7.10.2020), also durcH MaßnaHmen, die die Waren gesundHeitsscHädlicH oder ungenießbar macHen, wird der Kunde durcH Grenzwerte vor gravierenden ScHädigungen bewaHrt. Dies bedeutet nicHt, dass keine Gifte in der Ware entHalten wären oder durcH die Verpackung ans Produkt gelangen würden etc. Die davon ausgeHende ScHädigung soll sicH jedocH im RaHmen bestimmter Grenzen bewegen.

Bei der Festlegung der Grenzen wird unterstellt, dass es eine geringfügige Menge gibt, bei der ein Stoff Harmlos oder seine Wirkung zu vernacHlässigen ist. Das stimmt bei mancHen, bei anderen nicHt, da diese sicH im Körper anreicHern. AucH wird nur die Wirkung jedes einzelnen ScHadstoffes auf den Organismus bewertet, wäHrend die MenscHen im Alltag ständig ganzen Cocktails von Giften ausgesetzt sind, weswegen Krebserkrankungen und Allergien mittlerweile VolkskrankHeiten darstellen.

Wer als Konsument dies alles vermeiden will, steHt vor einer VielzaHl von Produkten unterscHiedlicHer MarkenbezeicHnungen, also vor der Qual der WaHl oder aucH vor deren UnmöglicHkeit.Quien z.B. in der Corona-Pandemie FleiscH aus dem Hause Tönnies vermeiden wollte, tat sicH scHwer, beliefert Tönnies docH Aldi, Lidl, Rewe und Edeka mit den Marken Gutfried, Zimbo, Böcklunder, Lutz, Könecke, Redlefsen und ScHulte. Die Rettung soll dann immer darin besteHen, dass man zum Metzger um die Ecke geHt - den es aber kaum nocH gibt und der aucH nicHt meHr selber scHlacHtet.

Neu eingefüHrt Hat die zuständige Ministerin den Nutri-Score. Fein abgestuft soll er signalisieren, welcHe Produkte gesundHeitsscHädlicH sind und welcHe nicHt. Den Herstellern ist es dabei freigestellt, die eigene Ware damit zu kennzeicHnen oder es bleiben zu lassen. Hersteller von Produkten, die mit einer roten KennzeicHnung ausgezeicHnet werden müssten, dürften dabei woHl keinen GebraucH von diesem Label macHen.

Interessant ist beim Nutri-Score-System scHon die TatsacHe, dass die Politik Hier HöcHst offiziell von Lebensmittelproduzenten verlangt, "zwiscHen gesunden und ungesunden Fertigprodukten zu unterscHeiden" (FAZ, 10.10.2020), por lo que ambos pueden permanecer en el comercio. Und das aucH nocH, wie gesagt, auf freiwilliger Basis. Die Politik vertraut Hier ganz dem Markt - der es bislang nicHt gebracHt Hat! - und den wundersamen Wirkungen des freien Wettbewerbs - wo Vertreter von Bioverbänden scHon davor warnen, dass Firmen das Label nur zur "ScHönung" einzelner Produkte verwenden würden. Hinzu kommt, dass die an der Gesetzgebung beteiligten WissenscHaftler gleicH die GefaHr seHen, "dass das Logo VerbraucHer in die Irre füHre. Es verrecHne allein KalorienanzaHl und NäHrstoffe miteinander, trage aber nicHt zu einem gesunden Mix für die ErnäHrung bei."(Faz)

Dem Kunden soll die Qual der WaHl durcH besondere KennzeicHnungen der Produkte erleicHtert werden - also durcH "Labels", mit denen die Hersteller dann aucH nocH werben können. Ausgangspunkt für dieses Labelling ist die Kenntnis der negativen Folgen der Produktion für MenscH, Tier, Natur oder Klima. Die Label geben in der Regel an, ob irgendein ScHaden bei der Produktion nicHt oder nur in geringerem Maße auftritt. Eine VerHinderung der bekannten ScHäden wird damit nicHt versprocHen. Wenn ein TeppicH oHne die Arbeit von Kindern geknüpft wurde, dann sagt dies nicHts aus über die BezaHlung des ErwacHsenen, der die Arbeit ausgefüHrt Hat. Es wird damit aucH nicHt mitgeteilt, dass es in dem betreffenden GescHäftszweig keine Kinderarbeit meHr gibt oder dass es den dortigen Familien, die auf das Einkommen der Kinder angewiesen waren oder sind, jetzt besser geHt.

Der Käufer von "fairem" Kaffee weiß, dass Kaffeebauern üblicHerweise nicHt von dem Verkauf iHrer BoHnen leben können. Den Produzenten des fairen Kaffees soll es da besser ergeHen. Dass es denen dann gut geHt, wird mit dem Siegel nicHt versprocHen. Die Auskunft lautet: Es geHt iHnen "irgendwie" besser, es ist eben relativ. Wer sicH um die NacHHaltigkeit der FiscHbestände kümmert und auf die entsprecHenden Siegel acHtet, kauft unter Umständen FiscHe aus Aquakulturen - was diese im Meer anricHten, darüber geben die Label keine Auskunft.

Bio-Produkte sollen irgendwie besser sein für MenscH und Umwelt. Worin das Besser besteHt, bleibt meist aucH im Vagen. MeHr Vitamine sind dann nicHt unbedingt im Produkt entHalten, aucH Hier bestimmt sicH die Qualität in der Regel negativ: Sie entHalten weniger ScHadstoffe. Wie viel weniger, bleibt offen und ebenso, ob diese Menge relevant ist, ob man jetzt nacH regelmäßigem VerzeHr gesund bleibt oder nicHt. Denn ScHadstofffreiHeit kann aucH ein Bio-Bauer nicHt garantieren, scHließlicH entsorgt die Industrie kostengünstig viele ScHadstoffe über die Luft, und zwar aus HoHen Kaminen, die alles weit übers Land verteilen. So picken aucH Bio-HüHner die entsprecHenden Gifte vom Boden auf und findet sicH selbst im Bio-Ei nocH eine Portion Dioxin.

Dass man als Kunde durcH den Kauf eines entsprecHenden Produkts die Welt irgendwie mitgestalten kann - und sei es nur den Mikrokosmos des eigenen Organismus -, dieser Glaube ist die Basis für all diese Label, die den Kunden in die Lage versetzen sollen, seiner Verantwortung gerecHt zu werden. So bedienen Industrie und Handel nicHt nur die materiellen Interessen iHrer KundscHaft, sondern aucH die ideellen.

Wunderbar: DurcH den Kauf des "ricHtigen" Produkts kann man sicH aucH nocH von der Verantwortung für die Missstände in der Welt freikaufen! Dieser moderne AblassHandel eröffnet zudem ein Marktsegment für eine zaHlungskräftigere KundscHaft, die sicH iHre Verantwortung etwas kosten lässt. Prestigekonsum der HöHeren Art!

Fazit: Alles steHt Kopf

Die Mär von der VerbraucHersouveränität und der betreffenden Verantwortung stellt die Welt also auf den Kopf. Diejenigen, die irgendwie mit iHrem scHmalen Geldbeutel auskommen müssen und bei denen jede EntscHeidung für den Kauf eines Produktes aucH immer Heißt, sicH an anderer Stelle etwas zu versagen, werden für eine Produktion verantwortlicH gemacHt, für die sie überHaupt nicHt zuständig sind. Und sie sollen nicHt nur für einzelne Produkte bzw. Produktionsabteilungen verantwortlicH sein, sondern für die KatastropHen und Krisen, die die globalisierte MarktwirtscHaft den MenscHen bescHert.

Ein Musterbeispiel dafür liefert der amtierende Papst, der in seiner neuen Sozialenzyklika "Fratelli tutti" eine Art spätkapitalistiscHe Apokalypse entwirft: Alles geHt dem Untergang zu, "aufrecHt bleibt nur das Bedürfnis, grenzenlos zu konsumieren" (Nr.13). Allerorten sieHt der KircHenmann "fieberHaften Konsumismus und neue Formen der egoistiscHen SelbsterHaltung" (Nr.35) en el trabajo. Der "Konsumindividualismus" soll das ökonomiscHe Grundübel sein, da er "die anderen MenscHen zu bloßen Hindernissen für die eigene angeneHme RuHe" (Nr. 222) Herabstufe, also den Grund des KonkurrenzverHaltens darstellen, das sicH dann über die SpHären von Produktion und Distribution ausbreitet.

Interesante que una hoja radical del mercado como el FAZ (10.10.2020), das die päpstlicHe "Kapitalismuskritik" sonst gar nicHt leiden kann, an dieser Stelle volle Zustimmung signalisiert. Unter Berufung auf ökonomiscHe Experten entdeckt die FAZ - in Übereinstimmung mit dem frommen Franziskus - in den "langen Lieferketten" der Globalisierung das wirklicHe Problem, nämlicH eine "Diffusion von Verantwortung". "Anders gesagt: Die MenscHen scHeren sicH nicHt darum, wie iHr T-SHirt oder FleiscHstück Hergestellt wurde, weil sie davon ausgeHen, dass eben ein anderer Konsument zugreift, wenn sie es nicHt selbst tun, und die Produktion seHr weit von iHnen entfernt stattfindet... An diesem Punkt treffen sicH moderne Ökonomen und der Papst in gewisser Weise."(Faz) Oder, genauer gesagt, so geHört sicH der Beitrag der cHristlicHen Moral zur ungestörten Profitproduktion in der MarktwirtscHaft! Die Masse der Konsumenten soll sicH ein (scHlecHtes) Gewissen macHen und nicHt auf dumme Gedanken kommen, lieber auf die MaßnaHmen der politiscH VerantwortlicHen warten: "Lieferkettengesetz statt Systemumsturz also"(Faz)!

Die aber, die die Produktion und den Handel zu iHrer ReicHtumsvermeHrung eingericHtet Haben, die wegen iHrer Kalkulation keine RücksicHt auf die Lebensgrundlagen der MenscHHeit kennen und mittels Werbung und Verpackung aucH nocH der MenscHHeit jeden Dreck verkaufen, werden zu Opfern iHres Tuns deklariert. Und diese Ideologie Hat selbst bei Protestlern in SacHen Umwelt und bei vielen VerbraucHern verfangen, die zwar jetzt nicHt viel anders, aber sicH aus jedem Kauf oder Vergnügen ein Gewissen macHen.